Sociedad Española de Psiquiatría y Psicoterapia del Niño y del Adolescente

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Reflexión sobre la identidad en una situación clínica particular

PDF: fillat-reflexion-identidad.pdf | Revista: 17-18 | Año: 1994

Núria Fillat
Psicóloga de la Fundación Eulàlia Torras de Beà. Hospital de la Cruz Roja Barcelona.

Comunicación presentada en el VIII Congreso Nacional de la Sociedad Española de Psiquiatría y Psicoterapia del Niño y del Adolescente (S.E.P.Y.P.N.A.) que bajo el título “La identidad y sus trastornos” tuvo lugar del 21 al 23 de octubre de 1994 en Toledo.

Los cambios que se van produciendo en la sociedad actual son tan rápidos que nos encontramos ante situaciones nuevas y complejas a las que a veces no sabemos como responder, y que requieren una reflexión especial, y flexibilidad para estar dispuestos a plantearnos una y otra vez los conceptos y las teorías, para encontrar, sino respuestas, por lo menos distintos puntos de mira.

Mi interés en presentar esta experiencia clínica se debe a que creo que como tal es poco frecuente, y para mi nueva. Su núcleo es la particular constelación familiar de Santiago.

Santiago es un chico de 8 años y seis meses, que llega a la consulta, a petición de la escuela especial a la que asiste por primer año, acompañado de Jaime, de unos 40 años, A primera hora de la mañana llegan al Servicio muy desorientados. Han estado dando vueltas por el hospital sin saber adonde tienen que ir ni la hora; solo saben que les manda la escuela. Han concertado una hora por teléfono en algún servicio del hospital, no ha sido en el nuestro, de todos modos deciden esperar por si queda algún hueco y podemos atenderles. Jaime comenta en secretaría que él ha pedido permiso en su trabajo para acompañar al niño. Una vez en el despacho, Jaime explica, de una forma confusa, tanto el motivo de la consulta como los antecedentes del niño, a saber:

Hasta el curso pasado había ido a una escuela publica pero debido al fracaso escolar la escuela insistió hasta conseguir que Santiago, este curso asistiera a una escuela más adecuada a sus capacidades intelectuales. Es por recomendación de esta escuela actual que consultan. Piden que hagamos un diagnóstico de Santiago.

Jaime me dice también que él no es el padre de Santiago y que el padre no ha podido venir porque tiene dificultades laborales que no le permiten salir del trabajo. Jaime explica que los padres de Santiago se separaron cuando el niño tenía 1 año y medio, y fue a vivir a su casa y después el niño también. Lo explica de tal forma que no me queda claro quien fue a vivir a su casa, si el padre o la madre. Pregunto si viven en su casa el niño y el padre. Asiente diciendo que la madre no se cuidaba del niño y le pidió al padre que se encargara de él.

Todo está dicho de tal manera que queda en el aire, o quizá sobreentendido, que Jaime y el padre de Santiago forman una pareja.

A lo largo de esta parte del relato, que me desorienta y confunde, se me hace más clara la desorientación de Jaime y Santiago dando vueltas perdidos en el Hospital, como forma de expresar la dificultad de ellos mismos, o por lo menos de Jaime, para orientarse en su propia situación, elaborarla y encontrar su camino.

Una vez aclarada la constelación familiar, y probablemente ante mi aceptación, Jaime se relaja. Entonces se me hace claro el temor de ser rechazado con que venía. A partir de este
momento, empieza a hablar de una manera clara sobre el niño, y lo hace como lo harían muchas madres.

Explica que él tiene más facilidades en su trabajo que el padre y que por esta razón es él quien acompaña generalmente al niño y se hace cargo de él. Explica la situación de abandono que sufrió el niño, su retraso evolutivo, y como él lo ha criado. Dice: “cuando lo cogí era una masa y ahora es un niño”.

Se hace evidente que Jaime es el que se ha encargado de hacer funciones maternas para el niño. El padre está siempre trabajando. Jaime explica que él no quiere absorberlo, deja que el padre cuide de él, pero es el mismo niño quien le reclama a él y quiere que “Jaime le arrope”. Aquí Santiago se sonríe, se le echa al cuello y le abraza cariñosamente.

Poco a poco Jaime explica lo mal que “se lo han pasado” con el cambio a la escuela especial, lo mucho que les ha costado aceptarlo aunque, reconoce que al niño le ha ido muy bien, ha progresado mucho.
Explica que hace dos años el niño empezó a decir que los niños en la escuela le decían que no tenía madre. Coincidió con que en este momento, la madre se interesó por el hijo, del que no había sabido nada desde hacía cinco años. La madre vive en otra ciudad, en el extremo opuesto de la Península, tiene otra pareja e hijos. Explica que fue un momento difícil ya que entendía que el niño tenía que conocer a su madre pero por otra parte la madre no se había interesado por su hijo durante todos esos años. Dice que la madre es muy importante para un niño; él sabe lo importante que es su madre para él y piensa que para Santiago también debe serlo.

La madre quería llevarse un mes de vacaciones a Santiago pero les daba miedo que la madre se llevara el niño cuando ni se conocían. Decidieron ofrecer a la madre que viniera a pasar 15 días aquí con Santiago, y según como fuera el encuentro que se lo llevara unos días de vacaciones. Lo hicieron así y luego el niño se fue con su madre, pero a los dos días de llegar allí llamó a Jaime para que fuera a buscarlo. Al cabo de pocos días Jaime y el padre, como una pareja de padres sensibles, fueron a recogerlo. El niño no ha tenido más relación con la madre, pero sabe que existe. La madre también tiene noticias del niño a través de la abuela materna que vive aquí y con la que Santiago mantiene relación.

Jaime explica la vida que hace el niño: sale a jugar con los amigos a la calle, y como se le pasa la hora de volver, tiene que ir a buscarle. Mientras hablamos, el niño está atento a la conversación y le sonríe. Explica cómo él se encarga de llevarle al médico, comprarle ropa cuando la necesita, de reñirle, o darle permiso para ir a jugar, etc., y como harían muchas madres, disculpa al padre de que no puede ocuparse de su hijo por la inestabilidad en su trabajo, sale pronto de casa y vuelve tarde, cuando el niño ya esta bañado, ha cenado y a veces está en la cama.

Durante la entrevista Santiago está atento a Jaime y a mí. Cuando me dirijo a él, responde tímidamente, mirando a Jaime. Le pregunto si quiere dibujar y acepta. Santiago dibuja a Jaime, le muestra a él el dibujo y lo que escribe, Jaime se lo valora y le enseña los errores de su escritura. La relación resulta enternecedora.

Se nota afecto y una buena relación entre ellos. (Ver dibujo n.º 1.)

Durante la exploración practicada más tarde, Santiago hace un contacto directo, tranquilo y colaborador. Busca la atención del adulto, se muestra sonriente y cariñoso.

Presenta dificultades importantes en el área del pensamiento y del lenguaje, aunque parece tener más posibilidades de las que reflejan en las pruebas. Se le ve interesado por el aprendizaje y ganas de hacer las cosas bien.

Al pasarle el test de Corman, se le pide que dibuje una familia y pregunta “¿qué es una familia?”

Dibujo 1

Dibujo 1

Entonces, dibuja “uno grande de 10 años, un payaso y uno pequeño de un año”. No dice padre ni hijo. Al preguntarle si hay alguien más en esta familia dice “¡ay! la madre”, la dibuja y dice “está volando”.

Estas respuestas al Corman nos parecen muy expresivas de la experiencia emocional de Santiago en su grupo familiar compuesto desde hace 7 años por Jaime y el padre. De la misma forma que la “familia” en el sentido habitual es la experiencia emocional de la mayoría de niños, para Santiago su experiencia emocional inmediata y vivida es la pareja de hombres que le han cuidado en su crecimiento. Para él la “familia” tradicional es un conocimiento intelectual, como lo sería para otros niños una pareja homosexual. (Ver dibujo n.º 2.)

A la visita siguiente vienen el niño y Jaime, nuevamente disculpando al padre, que está fuera de Barcelona trabajando (el padre tiene que desplazarse fuera de la ciudad para su trabajo).

En esta entrevista Jaime se muestra preocupado por la nueva situación que se les ha planteado, es muy probable que en su trabajo le trasladen a una ciudad lejana. No puede renunciar, y le interesa para progresar a nivel laboral.

En esta entrevista Santiago hace un dibujo (ver dibujo n.º 3). Primero dibuja los 3 cuadrados pone los nombres, el suyo en medio del padre y Jaime. Más tarde añade Jordi que es un vecino, amigo suyo.

Quedamos para una nueva entrevista para poder tratar el tema más ampliamente.

Dibujo 2

Dibujo 2

Jaime viene solo a la siguiente entrevista, donde expresa abiertamente su compleja situación. Por una parte desea el traslado de su trabajo porque aquí no puede promocionarse, y durante mucho tiempo se ha dedicado a cuidar el niño y no se ha dedicado a él mismo, ni a nivel laboral ni personal. Por otra parte no quiere presionar al padre de Santiago para que le sigan a la nueva ciudad, y tampoco quiere renunciar al niño al cual ha dedicado 7 años de su vida y lo ha criado, dice “para él yo soy su madre”. Por otra parte en la ciudad donde se trasladará vive su propia familia que desconocen su situación. Aunque él está dispuesto a afrontarlo, reconoce que le preocupa “sino no estaría hablando aquí de esto”, dice.

Ante esta situación compleja no sabe qué hacer, dice que él necesita ayuda, y si se va sin Santiago la necesitará también. Está preocupado por lo que pueda pasar con Santiago si se va sin él; dice, “sólo me tiene a mí, el padre está más ausente, la familia del padre no aceptan la situación del hijo, se desentienden”. Aunque Jaime quiere que el niño tenga relación con los abuelos, no cree que puedan hacerse cargo de él ni el padre ni su familia.

Explica que este fin de semana se fue tres días a una celebración familiar, y el niño le despidió en el aeropuerto llorando, diciendo que si se va ya no va a volver y no le verá más.

Al llegar no ha visto todavía a Santiago, porque está de campamento con el colegio y “yo me lo paso mal, me encuentro pensando, cómo lo harían unos padres, qué estará haciendo Santiago. Sé que está bien y que se divierte, pero pienso que por la noche a lo mejor lo pasa mal”.

En esta exposición clínica vemos cómo, al principio, en la primera visita, Jaime está incómodo y confuso, pienso que quizá con temor a que yo le rechace, pero poco a poco, a medida que se va tranquilizando, puede explicar con claridad la situación de Santiago y la suya propia. Va desplegando el cuadro de este grupo familiar especial, las relaciones entre ellos, y expresando las emociones que vive hacia el niño y también hacia su propia situación.

Yo, escuchando a Jaime, tengo delante una persona sensible, como él dice muy bien “como una madre”, la madre que sabe de las emociones de su hijo, a quien duele reconocer la deficiencia de éste y la necesidad de escuela especial, que le cuida, se preocupa y no quiere separarse de él.

Dibujo 3

Dibujo 3

Ya desde el inicio mi contratransferencia fue de simpatía hacia él que quizá facilitó el que se sintiera aceptado tal como es, lo que le permitió en las siguientes entrevistas pedir ayuda para él mismo.

Jaime viene con su soledad para compartir conmigo la encrucijada en que se encuentra y en busca de ayuda, “no sé por qué le cuento todo esto a Vd. no sé si es el sitio adecuado, pero yo voy a acabar mal y yo necesito ayuda también”. Parece sentirse solo con su pareja, con quien parece que no puede dialogar abiertamente. Solo, ante su familia que desconocen su vida, y ante la familia de su pareja que no aceptan esta situación. Soledad que también reconoce en Santiago, “sólo me tiene a mí”.

Hasta el momento desconozco muchos datos de la vida de Santiago, sobre todo del primer año y medio, que vivió todavía con la madre y un tiempo en que vivió con los dos padres, solamente me transmitieron que había abandono, y llevaba un retraso general en su desarrollo. Al padre lo conozco sólo a través de Jaime.

Según la prueba de Corman, la representación mental de familia es confusa para Santiago. El niño convive con su padre, un padre con problemas acerca de la propia identidad sexual masculina, dependiente de su pareja homosexual (económica y emocionalmente). Convive con la pareja homosexual del padre que hace las funciones maternas pero también paternas.

Y una madre que como el niño dibuja, “volando”, es una madre ausente pero una madre según explican que descuidó a su hijo, y con quien no ha podido vincularse.

Creo que sobre esta experiencia tenemos casi solamente interrogantes y muy pocas respuestas.

Son muchas las cuestiones que se nos plantean, no sólo sobre como debió vivir Santiago los primeros años con sus padres sino también qué pudo aprovechar de la relación con su madre que luego se distanció de él, y que pudo transferir a la pareja que le cuida ahora. ¿Cómo influirá la experiencia emocional actual de Santiago en la construcción de su identidad?

Algunos niños que viven siempre con sus padres evolucionan hacia la homosexualidad. Se han descrito organizaciones edípicas que parecen facilitarlo, ¿pero, no es mucho más complejo el proceso de lo que parece a través de algunas descripciones?

En base a la constelación actual edípica de Santiago ¿creemos muy probable o forzoso que evolucione hacia la homosexualidad? Sabemos que la identidad y la identidad sexual se desarrollan en base a las identificaciones que se van integrando, pero en este caso Santiago, que contaría casi solamente con identificaciones masculinas ¿hacia qué objeto se dirigiría? Pero sabemos también que el niño no se identifica solamente con la madre y el padre como objetos globalmente sino que se identifica, a lo largo del tiempo, y en forma evolutiva con aspectos de uno y otro, lo cual hace el proceso de identificación complejo y rico, lleno de matices ¿Qué objetos internos para la identificación podrán ofrecer Jaime y el padre, a Santiago?

Esta experiencia clínica con Jaime y Santiago evoca la situación de la pareja homosexual femenina en que una de las dos mujeres se hace inseminar y tiene un hijo. Los interrogantes que se nos plantean tienen mucho en común. Claro que tanto en la situación que nos ocupa, como en la pareja de mujeres, la calidad de las relaciones, la personalidad de los cuidadores debe ser un factor definitivamente importante.

La tendencia normal del niño a diferenciarse, y la nada excepcional necesidad de oponerse y enfrentarse para conseguirlo ¿qué papel jugará en la evolución de Santiago, en sus identificaciones y búsqueda de objeto?, ¿qué papel tendrán sus otras relaciones, con abuelos, maestros de ambos sexos, compañeros de clase…? y el factor genérico o constitucional ¿qué influencia puede tener en todo esto?

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